L’equivoco stragante es el primer «drama giocoso» de Rossini y su tercera ópera, también es una de sus obras menos conocidas, porque el libretista Gaetano Gasparri la llenó con dobles sentidos obscenos con el resultado de que después de la tercera función la censura la prohibió y desde entonces se ha representado en muy pocas ocasiones. Moshe Leiser y Patrice Caurier han pensado que era inútil tratar de modernizar el libreto y han ambientado la obra en un elegante apartamento de principios del siglo XIX, pero con algunos detalles divertidos surrealistas que resaltan lo absurdo de la historia.