Reportajes
La ópera vuelve a reinar en los festivales internacionales
Tras un infausto 2020, los eventos operísticos estivales empiezan a recuperar el tono, con mascarilla, distancia social y aforos reducidos, pero con conciertos con público presencial
Tras un infausto 2020, los festivales de verano empiezan a recuperar el tono, con mascarilla, distancia social y aforos reducidos, pero con conciertos con público presencial, aunque las programaciones deban nutrirse sobre todo de espectadores locales y nacionales ante una movilidad internacional todavía limitada. En Europa, el certificado digital Covid-19 o pasaporte de vacunación podría animar el sector a finales de primavera o principios de verano.
Este 2021 será el año del inicio de la recuperación de los festivales de verano tras un aciago 2020. Sin embargo, por el camino se han quedado este año algunas programaciones que por las restricciones y fechas se han visto obligados a cancelar, como el Festival Mozart de Salzburgo, Festival de Pascua de Baden Baden, festivales Händel de Kalsruhe y de Halle, Festival de Wiesbaden y Opera Pä Skäret en Suècia. Otros han optado por ganar tiempo, como el Festival de Pascua de Salzburgo, que decidió trasladar su programación a otoño, durante el fin de semana de Todos los Santos; o el Festival Händel de Gottingen (Alemania), que ha cambiado las fechas habituales de su programación de mayo a septiembre, aunque el mes pasado mantuvo el contacto con su público con una oferta digital.
La velocidad con la que los diversos países están vacunando a sus ciudadanos se percibe en los festivales. GRAN BRETAÑA, con un alto porcentaje de su población vacunada y con el 19 de mayo como fecha del inicio de la normalización en la vida de los británicos, exhibe músculo en sus festivales operísticos estivales. Los prados de Glyndebourne recibieron el 20 de mayo los primeros espectadores de su festival, que se prolongará hasta el 29 de agosto. Mascarilla en el interior del teatro, distancia social y reducción de un aforo que espera poder aumentarse en julio y agosto. El programa ofrece cinco óperas, tres de ellas nuevas producciones: Katia Kavanová, título que inauguró el festival, con dirección de escena de Damiano Michieletto, en su debut en Glyndebourne, y musical de Robin Ticciati; Il turco in Italia, con dirección escénica de Mariame Clément y musical de Sesto Quatrini; y Luisa Miller, nunca antes representada en el festival, con dirección de escena de Christof Loy y musical de Enrique Mazzola. Glyndebourne repone la producción de Nicholas Hytner de Così fan tutte y ofrece una versión semi escenificada de Tristan und Isolde. La programación, que ha renunciado a una sexta ópera prevista, La flauta mágica, se completa con cuatro conciertos.
Glyndebourne fue el primero, pero no es el único festival en una finca campestre inglesa que ofrece ópera. Garsington Opera presenta cinco títulos del 3 de junio al 29 de julio: El caballero de la rosa, Evgeni Onegin, Amadigi di Gaula de Händel, Le comte Ory y The Selfish Giant de Barber. Longborough Festival Opera, por su parte, ha programado del 1 de junio al 3 de agosto Die Walküre, Così fan tutte, Il ritorno di Ulisse in patria y La zorrita astuta. Grange Opera Park Festival presenta del 10 de junio al 18 de julio Falstaff, La Bohème, Iván el Terrible y el estreno mundial de The live & death of Alexander Litvinenko de Anthony Bolton. Waterperry Opera Festival ha programado del 12 al 21 de agosto L’elisir d’amore, Hansel & Gretel, Ariel de Jonathan Dove y Pedro y el lobo. Dorset Opera Festival presenta del 19 al 24 de julio en The Coade Theatre, en Bryanston, Acis y Galatea de Händel que se ofrecerá en la orquestación de Mozart, Così fan tutte y Don Giovanni. Nevill Holt Opera ha programado dos títulos del 4 al 25 de agosto, La traviata y Don Giovanni. Y Brompton Classical Opera presentó en mayo la primera de las dos óperas de Gluck que ha programado, La corona; en julio y agosto ofrecerá Paride ed Elena. Tampoco faltan los festivales de ciudad para los que prefieren el asfalto al prado, el Holland Opera Park en Londres y el Festival Internacional de Buxton.

La sede del Festival de Santa Fe
Con más de la mitad de su población ya vacunada y con el aliciente del permiso gubernamental para los vacunados de poder ir sin mascarilla, los festivales de verano en ESTADOS UNIDOS renacen tras un 2020 inexistete para ellos, pero tomando precauciones y curándose en salud. Cincinnati Opera y Glimmerglass Festival salen del teatro y se van al parque a representar ópera. El Festival de Santa Fe no necesita salir porque cuenta con un teatro abierto, que este 2021 presenta cuatro títulos del 10 de julio al 27 de agosto. Una nueva producción firmada escénicamente por Laurent Pelly de Le nozze di Figaro con dirección musical de Harry Bicket que abrirá la programación, que acoge el estreno mundial de la última ópera de John Corigliano, The lord of cries, que mezcla Las bacantes de Eurípides y Drácula; una nueva producción de Evgeni Onegin con dirección de escena del sudafricano Alessandro Talevi y musical de Nicholas Cartes, y A Midsummer Night’s Dream de Britten en una coproducción con Garsington Opera dirigida escénicamente por Netia Jones y con Harry Bicket en el podio.
El Festival de Cincinnati se traslada al parque Summit donde presentará del 17 al 29 de julio Carmen con J’Nai Bridges y Stephen Costello en una producción dirigida escénicamente por Omer Ben Seadia y musicalmente por el valenciano Ramón Tebar; Tosca con Ana María Martínez, Russell Thomas y Quinn Kelsey interpretando al trío protagonista; y El barbero de Sevilla. El Glimmerglass Festival ha decidido trasladar el escenario al exterior donde representarán del 15 de julio al 17 de agosto La flauta mágica; Songbird, una adaptación en clave de jazz de La Périchole de Offenbach; Il Trovatore; y una selección de fragmentos de óperas de Wagner que se presenta con el título Gods and Mortals.

El Festival de Salzburgo recupera la 'Elektra' ofrecida el verano pasado, con la soprano lituana Aušrine Stundyte y dirección escénica de Krzysztof Warlikowski.
Con menos población vacunada que Gran Bretaña y Estados Unidos, pero avanzando semana a semana, los festivales de verano en la Europa continental también empiezan a sacar pecho. En AUSTRIA el Festival de Salzburgo, que heroicamente ofreció una edición reducida en 2020 coincidiendo con su centenario, prosigue la celebración este año y, del 17 de julio al 31 de agosto, presenta ocho títulos operísticos, dos de ellos en versión de concierto: Neither de Morton Feldman y La Damnation de Faust con la dirección musical de Alain Antinoglu y un reparto que incluye a Elīna Garanča, Charles Castronovo, Ildar Abdrazakov y Peter Kellner. Dos nuevas producciones, Don Giovanni firmada escénicamente por Romeo Castellucci y musicalmente por Teodor Currentzis, e Intolleranza 1960 de Luigi Nono con dirección de escena de Jan Lauwers y musical de Ingo Metzmacher. Y cuatro reposiciones: la celebrada Elektra protagonizada el año pasado por la soprano lituana Aušrine Stundyte con dirección escénica de Krzysztof Warlikowski; el minimalista Così fan tutte que presentó en 2020 Christof Loy; la puesta en escena de Robert Carsen del oratorio Il trionfo del Tempo e del Disinganno con Cecilia Bartoli presentada en el Festival de Pentecostés de Salzburgo; y Tosca con reparto de lujo encabezado por Anna Netrebko, Yusif Eyvazov y Ludovic Tézier dirigidos por Marco Armiliato.

El Festival de Múnich repondrá la 'Turandot' con dirección de escena de Carlus Padrissa (La Fura dels Baus)
En ALEMANIA, donde la pandemia ha mantenido los teatros cerrados durante meses, los festivales confían en que la reapertura en mayo siga en verano. El Festival de Ópera de Múnich, del 24 de junio al 31 de julio, ha preparado un sustancioso menú, como era habitual, con 15 óperas, dos de ellas nuevas producciones: Tristan und Isolde, con dirección de escena de Krzysztof Warlikowski y musical de Kirill Petrenko, con Jonas Kaufmann y Anja Harteros encabezando el reparto; e Idomeneo, con dirección escénica de Antú Romero Nunes y musical de Constantinos Carydis, que se ofrecerá en streaming el 24 de julio a través de la web de la Bayerische Staatsoper. Y las reposiciones son: Der Freischütz, El holandés errante, Rusalka, Tannhäuser, Turandot, Le nozze di Figaro, Macbeth, Die Vögel, Otello, Aida, Salome, 7th Death of Maria Callas y Los maestros cantores de Núremberg.
El Festival de Bayreuth regresa tras la cancelación en 2020 con una programación reducida. Se inaugurará el 25 de julio con una nueva producción de El holandés errante con dirección de escena de Dimitri Tcherniakov y musical de Oksana Lyniv, primera mujer en dirigir en el foso de Bayreuth. En el reparto Asmik Grigorian, Georg Zeppenfeld, Marina Prudenskaya y Eric Cutler. Se reponen las producciones de Los maestros cantores de Núremberg y Tannhaüser, se ofrece una versión semi escenificada de Die Walküre, una audición en versión de concierto de Parsifal y dos conciertos dirigidos por Andris Nelsons con fragmentos de Lohengrin, Parsifal, Die Walküre y El ocaso de los dioses.

Fachada del teatro de Bayreuth, sede del famoso festival wagneriano
Desde finales de abril los teatros en ITALIA pueden acoger público con restricciones de aforo. El primero de los festivales, el Maggio Musicale Fiorentino, subió el telón de la primera de las cuatro funciones de Adriana Lecouvreur el 27 de abril (crítica en página 74). A partir del 4 de junio un nuevo título sube a escena, Il Trovatore, con una nueva producción dirigida por el furero Carlus Padrissa con dirección musical de Zubin Metha y Saioa Hernández y Roberto Aronica encabezando el reparto. El 28 de junio otra nueva producción, Il ritorno di Ulisse in patria, con dirección de escena de Robert Carsen y musical de Ottavio Dantone y a partir del 7 de julio una rareza, Siberia de Giordano con dirección musical de Gianandrea Noseda y escénica de Roberto Andò.
Italia es la campeona de los festivales con escenarios al aire libre. El mayor de todos, el de la Arena de Verona (enlace reportaje ÓA) ha previsto nuevas producciones de Cavalleria rusticana y Pagliacci, Turandot, La traviata, Aida y Nabucco, con predominio de tecnología digital en detrimento de elementos corpóreos; contará con grandes nombres –Netrebko, Kaufmann o Domingo–, incluyendo a intérpretes españoles. También tira de estrellas la segunda edición de Regione Lirica, festival creado por el Teatro San Carlo en la plaza del Plebiscito, frente al coliseo napolitano que propone dos títulos en versión de concierto, del 25 de junio al 17 de julio: Carmen con Elīna Garanča y Jean-François Borras dirigidos por Dan Ettinger, e Il Trovatore, con Anna Netrebko, Yusif Eyvazov, Luca Salsi y Anita Rachvelishvili bajo la batuta de Marco Armiliato.
Italia es la campeona de los festivales con escenarios al aire libre. El mayor de todos, el de la Arena de Verona, ha previsto nuevas producciones de Cavalleria rusticana y Pagliacci, Turandot, La traviata, Aida y Nabucco, con predominio de tecnología digital en detrimento de elementos corpóreos; contará con grandes nombres –Netrebko, Kaufmann o Domingo–, incluyendo a intérpretes españoles. También tira de estrellas la segunda edición de Regione Lirica, festival creado por el Teatro San Carlo en la plaza del Plebiscito, frente al coliseo napolitano que propone dos títulos en versión de concierto, del 25 de junio al 17 de julio: Carmen con Elīna Garanča y Jean-François Borras dirigidos por Dan Ettinger, e Il Trovatore, con Anna Netrebko, Yusif Eyvazov, Luca Salsi y Anita Rachvelishvili bajo la batuta de Marco Armiliato.

Una escena de la 'Adriana Lecouvreur' que inauguró el Festival del Maggio Musicale de Florencia
También con teatro al aire libre, el Festival Puccini de Torre del Lago desafía la pandemia dedicando su programación al beso. Del 23 de julio al 22 de agosto pondrá en escena el amor con Tosca, Turandot y La Bohème y estrenará cuatro mini dramas inspirados en el beso. Por su parte, el Festival de Macerata celebra el centenario de la primera función lírica en el Sferisterio con una nueva producción de Aida, de cuyo estreno se celebra el 150º aniversario, que dirigirá escénicamente Valentina Carrasco, y repondrá la histórica producción de La Traviata con dirección de escena de Henrick Brockhaus y escenografía de Josef Svoboda.
En agosto el Rossini Opera Festival de Pésaro (enlace reportaje ÓA) apuesta por el gran escenario de la Vitrifrigo Arena, donde inaugura con Moïse et Pharaon y donde también ofrecerá Elisabetta Regina d’Inghilterra, pero también presentará parte de su oferta –la más camerística– en el tradicional Teatro Rossini.

El principal escenario del Festival de Aix-en-Provence, el famoso patio del Arzobispado
FRANCIA no tiene previsto levantar el toque de queda hasta el 30 de junio, si la situación sanitaria lo permite, pero desde el 19 de mayo los teatros ya pueden acoger público sentado con aforo limitado. La celebración de los festivales dependerá de la evolución de la pandemia, pero aquellos con escenarios al aire libre tienen más posibilidades. Ahí está el festival Chorégies de Orange que del 18 de junio al 31 de julio ofrecerá conciertos y una ópera, Samson et Dalila con Marie-Nicole Lemieux y Roberto Alagna.
El Festival de Aix-en-Provence que dirige Pierre Audi (enlace entrevista ÓA), con teatros cerrados y al aire libre, es el más ambicioso. Ocho títulos del 30 de junio al 25 de julio con dos estrenos absolutos: Innocence, la última ópera de Kaija Saariaho, una coproducción con la Ópera Nacional de Finlandia, el Covent Garden, la Ópera de Holanda y San Francisco Opera con dirección escénica de Simon Stone cuyo estreno estaba previsto el año pasado; y The Arab Apocalipse del palestino-israelí Samir Odeh-Tamimi sobre la guerra del Líbano. El festival se inaugurará con una nueva producción conjunta con el Teatro Real de Madrid de Le nozze di Figaro con dirección de escena de Lotte de Beer, a la que seguirán nuevas producciones de Falstaff, con dirección escénica de Barrie Kosky; Tristan und Isolde, con dirección de escena de Simon Stone, que contará con Simon Rattle en el foso y un reparto encabezado por Stuart Skelton y Nina Stemme; y El Gallo de Oro con dirección escénica de Kosky. La programación se completa con una versión en concierto de I due Foscari con Leo Nucci, Francesco Meli y Marina Rebeka, y una escenificación de lamentos, madrigales y piezas instrumentales de Monteverdi, Rossi y Cavalli con el título Combattimento: The Black Swan Theory. -ÓA