Reportajes
A 145 años de la muerte de Bizet, padre de 'Carmen'
El talento del compositor francés no fue debidamente reconocido en su época y el estreno de 'Carmen' fue un fracaso
A pesar de que Carmen se considera hoy la obra maestra de la ópera francesa y la más popular de todo el repertorio –título que en estos días regresaba al liceu barcelonés–, su estreno fue un rotundo fracaso. El escándalo y las malas críticas le provocaron una depresión a su autor, un Georges Bizet en el momento álgido de su carrera. La historia del compositor es la de un genio no reconocido en vida. en junio se conmemoran 145 años de su muerte.
Autor de Carmen, quizás la ópera más popular de todos los tiempos, Georges Bizet (París, 1838-Bougival, 1875), nació en una familia de músicos y mostró una natural predisposición a la música desde la infancia. Su verdadero nombre era Alexandre-César-Léopold, pero a los dos años de edad fue rebautizado con el nombre de Georges, hecho que más tarde le provocaría no pocas confusiones. La madre era una dotada pianista y excelente cantante, al igual que su hermano, François Delsarte. El padre era peluquero, barbero y posteriormente llegó a ser profesor de canto, y ambos lo iniciaron en el estudio del piano. Viendo la asombrosa facilidad con que el jovencísimo Georges ejecutaba los más complicados ejercicios, lo llevaron al Conservatorio de París, en el cual fue admitido poco antes de cumplir diez años en el aula del prestigioso pianista y pedagogo Antoine François Marmontel.
Su talento para el piano quedó demostrado al asombrar incluso al mismísimo Franz Liszt, cuando le presentó una de sus difíciles piezas y Bizet fue capaz de tocarla enteramente a vista. A los catorce años ganó el primer premio de piano y a los dieciocho un concurso de operetas para el Théâtre des Bouffes Parisiens, organizado por Jacques Offenbach con Le Docteur Miracle, un título muy admirado por Rossini. Un año antes Bizet ya había mostrado su predilección por el teatro y la lírica con su primera aportación al género, La maison du docteur, ópera cómica en un acto. En 1857 y gracias a la cantata Clovis et Clotilde, Bizet ganó el Gran Premio de Roma, que concedía como beca de estudios dos años en dicha ciudad, uno en Alemania y dos en París, pudiéndose dedicar exclusivamente a la composición. En Italia halló la inspiración para explorar los secretos del género lírico, y los resultados se plasmaron en la ópera bufa en dos actos Don Procopio, con libreto en italiano e influencias del Don Pasquale de Donizetti. La excelente “farsa a la italiana” –como la denominó Bizet– no pudo ser escuchada en vida del compositor, estrenándose en 1906 en Montecarlo y un año después en Barcelona.
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