NOTICIAS
ACTUALIDAD
El tardío regreso de 'Anna Bolena' a Bilbao
La corte del monarca inglés Enrique VIII se instala este mes en el curso de ABAO Bilbao Opera de la mano de la exigente obra de Donizetti
Bilbao
ABAO Bilbao Opera
Donizetti: ANNA BOLENA
19, 22, 25, 28_11 (Palacio Euskalduna)
Anna Bolena: Joyce El-Khoury. Lord Riccardo Percy: Celso Albelo. Giovanna Seymour: Silvia Tro Santafé. Enrico VIII: Marko Mimica. Smeton: Marina Pinchuk. Lord Rochefort: José Manuel Díaz. Hervey: Josep Fadó. Bilbao Orkestra Sinfonikoa. Coro de Ópera de Bilbao (Dirección: Boris Dujin). Dirección musical: Jordi Bernàcer. Dirección de escena: Stefano Mazzonis di Pralafera repuesta por Gianni Santucci.
La corte del monarca inglés Enrique VIII se instala este mes en el curso de ABAO Bilbao Opera de la mano de la exigente obra de Donizetti sobre la llamada «reina sin cabeza» que tuvo que cancelarse en mayo de 2020 por el estado de alarma que marcó la crisis sanitaria en sus primeras fases.
Anne Boleyn fue la primera en muchas cosas. La primera plebeya inglesa en recibir del rey un título de nobleza por derecho propio, el marquesado de Pembroke, en lugar de por herencia. La mujer de moda y más importante de la corte a mediados de 1522 y la primera de las seis esposas que acabaría teniendo Enrique VIII que fue decapitada. En 1830, se convertiría en la inspiración para la primera de las óperas de Donizetti de la llamada Trilogía Tudor, que el compositor completaría con Maria Stuarda (1835) y Roberto Devereux (1837). Anna Bolena fue también la primera de las óperas que ABAO Bilbao Opera se vio obligada a cancelar al estallar, en marzo de 2020, la pandemia del coronavirus. Un año que quedará para la historia de la lírica, aunque desgraciadamente no por motivos musicales.
Este mes la temporada abaísta salda su deuda con la reine sans tête (“la reina sin cabeza”, como ella misma se denominó poco antes de perderla) al recuperar, del 19 al 28 de noviembre, las cuatro funciones que en 2020 quedaron pendientes de este título. En ellas podrá verse la misma propuesta escénica, firmada por Stefano Mazzonis di Pralafera –coproducción de la casa con la Opéra Royal de Wallonie-Liège, la Royal Opera House Muscat y la Opéra de Lausanne– y que, tras la muerte del regista en 2021 repone en Bilbao Gianni Santucci. El reparto presenta novedades en los roles de Bolena (la soprano Joyce El-Khoury), Enrico VIII (el bajo-barítono Marko Mimica) y Smeton (la mezzosoprano Marina Pinchuk), manteniendo en el resto de papeles a los cantantes anunciados hace casi ya tres años, con el tenor español Celso Albelo a la cabeza, contando con la mezzosoprano Silvia Tro Santafé como la rival de Bolena, Giovanna Seymour, papel que acaba de cantar en Les Arts de Valencia. Jordi Bernàcer –valenciano, como Silvia Tro– dirige a los solistas y a la Bilbao Orkestra Sinfonikoa (BOS), junto al Coro bilbaíno del que es titular Boris Dujin.

Stefano Mazzonis di Pralafera
Belcantismo cara a cara
El título de Donizetti constituía en 2020 la quinta y última ópera de la 68ª temporada de ABAO. Ahora, Anna Bolena avanza en el 71º ciclo abierto en octubre con I Puritani, ahondando en el belcantismo y en la coincidencia histórica de Bellini y Donizetti, cuyas carreras se solaparon y que estrenaron estas creaciones con apenas cinco años de diferencia. La Bolena donizettiana fue, de nuevo, la primera de ambas. Igual que se considera la primera que vive plenamente el movimiento romántico, lanzado al mundo por Victor Hugo. No solo en lo musical, añadiendo un alto grado de expresividad, sino también en su estructura teatral y en cierta “libertad histórica”, hasta convertir a la monarca decapitada en una “víctima romántica”, alabada en las biografías Estrella de la corte, de Serena Banbury, o en la escrita por Ana de Margaret Benger.

Celso Albelo como Percy en 'Anna Bolena'
El título es inmisericorde y poco agradecido con sus intérpretes en relación a la extrema dificultad que encierra la partitura. La soprano canadiense de origen libanés Joyce El-Khoury debuta en Bilbao en el papel titular, y promete sorprender a los abaístas. De plantear en sus inicos una carrera centrada en el repertorio para soprano lírica, “el bel canto me escogió”, ha comentado en alguna ocasión. Hasta tal punto que no teme alejarse de la senda más transitada en los teatros, interpretando óperas minoritarias como las donizettianas Belisario, Les martyrs o L’ange de Nisida.
El papel de Percy
El poder magnético del personaje protagonista hace que, sin ir más lejos, la parte del tenor no haya recibido históricamente tanta atención como sucede con otras de las escritas por Donizetti para esta vocalidad, aún cuando exige ligereza, volumen, musicalidad, un depurado estilo belcantista, agudos estratosféricos y elegantes medias voces. El tenor español Celso Albelo sabe bien de qué va, porque ha interpretado el papel en varias ocasiones, incluso, según explica, en esta misma producción “hace ya algunos años en Lieja; se trata de un montaje muy elegante y con un vestuario suntuoso, muy del gusto de los aficionados más clásicos pero sin perder dinamismo teatral: todos los entresijos de la corte se siguen y se entienden muy bien”.
El tinerfeño insiste en la dificultad del rol: “Con el respeto que se tiene a las partituras y aunque se siga optando por algunos cortes, con ellos se valora mejor la dificultad de este papel, romántico por antonomasia dentro del repertorio donizettiano, con su gran escena en el último acto, en el que elige sacrificarse junto a Anna en un aria maravillosa, ‘Vivi tu, te ne scongiuro…’, de una dificultad extrema. Es uno de los grandes retos vocales de mis casi 21 años de carrera.”
No hay que olvidar que los encargados de estrenar las partes de Percy y Anna fueron Giovanni Battista Rubini y Giuditta Pasta, respectivamente. Ella fue la primera en interpretar la extensísima sección de lucimiento final de la reina inglesa, una gran escena de locura antes de su ejecución, y él este personaje que siempre ha vivido a la sombra de su reina.– ÓA
NOTICIAS RELACIONADAS