Con ‘La Traviata’ regresa la ópera a Taiwán

El National Kaohsiung Center for the Arts repone este mes la puesta en escena de Yang Shih-Ping, con Chien Wen-Pin en el podio

04 / 03 / 2021 - Ken SMITH - Tiempo de lectura: 3 min

Print Friendly, PDF & Email
Traviata Weiwuying Una escena de 'La Traviata' en el Kaohsiung Arts Festival de 2016, cuando se estrenó el montaje de Yang Shih-Ping © National Kaohsiung Center for the Arts
Traviata Weiwuying Un ensayo de 'La Traviata' en el Kaohsiung Arts Festival de 2016, cuando se estrenó el montaje de Yang Shih-Ping © National Kaohsiung Center for the Arts
National Kaohsiung Vista aérea del National Kaohsiung Center for the Arts © National Kaohsiung Center for the Arts

Mientras los teatros de ópera de casi todo el mundo permanecen cerrados o funcionan con aforos reducidos –como sucede en España o Rusia– el National Kaohsiung Center for the Arts, en el sur de Taiwán, pondrá en escena La Traviata en su sala ocupada al pleno de su capacidad, de 2.236 localidades. Con una puesta en escena de Yang Shih-Ping, la obra será dirigida por el director musical y artístico de la casa, Chien Wen-Pin.

Conocido familiarmente como Weiwuying, el National Kaohsiung Center for the Arts de Taiwán devuelve este mes el género operístico a la cartelera asiática. Gracias principalmente a la rápida respuesta taiwanesa a la irrupción de la Covid-19 desde diciembre de 2019, la isla ha registrado solamente 870 casos y siete fallecimientos en una población de casi 24 millones de personas. En la línea de las disposiciones sanitarias actuales para las reuniones colectivas, el Weiwuying controlará la temperatura del público, el desinfectado de las manos y la obligatoriedad del uso de mascarillas en esta Traviata que se propone entre el 18 al 21 de marzo en el Teatro de la Ópera inserto en el complejo cultural de la importante ciudad portuaria de Kaohsiung, en el sur de la Taiwán.

"El montaje de Yang Shih-Ping sitúa la acción en época y lugar indeterminados, pero son vagamente parecidos al actual Taiwán"

La popular ópera de Verdi, con el director musical y artístico de la casa, Chien Wen-Pin, en el podio, podrá verse en el montaje de Yang Shih-Ping, que sitúa la acción en época y lugar indeterminados, pero que son vagamente parecidos al actual Taiwán; la propuesta quiere subrayar la forma en que la división del poder entre los géneros «no solo persiste, sino que tiende a agudizarse en el mundo moderno», según comenta Chien a ÓA. En la producción colabora el Kaohsiung Arts Festival, que ya ofreció la obra en 2016, dos años antes de que el Weiwuying se inaugurara.

Diseñado por la empresa holandesa de arquitectura Mecanoo, los 141.640 m2 del Weiwuying dominan un espectacular parque subtropical de 469.435 m2 en el sur de Taiwán y ha sido considerado como el mejor centro artístico techado del mundo, significando la mayor inversión cultural del país asiático después del complejo del Taipei National Theatre and Concert Hall (1987). Ya antes de su inauguración, en octubre de 2018, el Weiwuying era conocido por su vocación para la ópera occidental no solo por los doce años de residencia de Chien Wen-Pin como director residente de la Deutsche Oper am Rhein (1996-2018), sino por el hecho de haber incluso encargado una ópera nueva y de haber preparado varios montajes antes de su apertura. La primera producción del Weiwuying en tiempos de la Covid fue su Turandot de 2019 coproducida con la Deutsche Oper am Rhein, representada a teatro lleno en agosto de 2020.

Esta inminente Traviata presentará un reparto predominantemente taiwanés junto a la Kaohsiung Symphony Orchestra y al Kaohsiung Chamber Choir. Los solistas procedentes del extranjero deberán someterse a una cuarentena de 14 días y a un período de control sanitario personal antes de empezar el período de ensayos. «La ópera ha jugado un papel preeminente en la actividad artística del Weiwuying y desde su inauguración –afirma Chien– nos sentimos orgullosos del poder de convocatoria de nuestro teatro y del hecho de poder potenciar la presencia de los cantantes locales. En estos momentos no podemos dejar de reconocer la suerte de poder movernos en un ambiente sanitariamente seguro en una época en que el resto del mundo lucha contra la pandemia. Queremos dar ejemplo de que aun en el contexto de una pandemia somos capaces de proporcionar a nuestros ciudadanos una vida normal, lo que incluye, por supuesto, el disfrute de las artes».– ÓA