CRÍTICAS
NACIONAL
Ópera Garage repite la fórmula del éxito con 'Rigoletto'
Bilbao
Ópera Garage
Verdi: RIGOLETTO
Reducción para piano
Javier Franco, José Luis Sola, Ruth Terán, Sandra Ferrández, David Cervera, Pedro Quiralte. Miquel Ortega, piano. Dirección de escena: Emiliano Suárez. Naves Industriales de La Terminal, 3 de junio de 2022.
Continúa, plena de fuerza afortunadamente, la andadura de Ópera Garage, singular idea de adaptación libre de óperas populares que alumbraran hace unos años los empresarios reconvertidos en productores de ópera Macarena Bergareche y Emiliano Suárez, aquí en Bilbao, dentro de un garaje sentenciado a inmediato derribo. La idea se creó con el propósito de acercar un espectáculo caro por naturaleza a un público nuevo, más amplio, que puede animarse a probarlo contando con buenas voces a un precio más asumible.
Ópera Garage se ha repetido y repartido ya con varios títulos por media geografía peninsular. Las claves son constantes, buenas voces, adaptaciones libres, reducción a piano, supresión de los coros y escenificación minimizada que conserva un ágil movimiento y con acción contenida. Con cantantes convertidos en grandes actores llevados de la mano de Emilano Suárez, tanto la iluminación como el vestuario, que firman Carlos Alzueta y Carola Baleztena, muy eficaces, el espectáculo se apreció cuidadosamente pensado, con los intérpretes caracterizando inequívocamente a los personajes prescindiendo de elementos no significativos del atrezzo. El teatro que acogió la función eran dos naves industriales adosadas, una sirviendo de bufé o ambigú. El escenario, una franja abierta entre los espectadores en cuyo centro y a ambos lados estaba colocada la decoración, que se limitó a unos rectángulos con bordes iluminados que en los laterales identificaban los diversos lugares de la trama. El guion estaba simplificado libre y convenientemente, cuidando siempre de mantener intacta la idea musical, lírica, dramática o meramente instrumental; para ello, Miquel Ortega, desde el piano, desgranaba la orquesta verdiana en un juego de gran riqueza sonora, más allá de una simple reducción para estudio o ensayo, sino dando vida a un excelente soporte musical con personalidad propia para una ópera de cámara que resultó muy fiel a Verdi.
Un elenco de calidad hizo también las delicias del público. José Luis Sola encarnó con prestancia física y dotes naturales de fogueado tenor lírico a un Duca de muchos quilates; cantó un magnífico “Questa o quella…” desde un andamio, en el descanso, a la altura de un segundo piso; logró siempre una actuación adecuada a la figura del personaje, bien regada con fáciles y timbrados agudos. Su “Donna e mobile…” fue muy aplaudida. Javier Franco supo dar acertadas expresiones a la compleja figura del bufón; con una voz redonda y muy grata, emitida con facilidad y clara vocalización, logró dar vida a un espléndido Rigoletto vestido de Joker, lleno de pasiones contradictorias. Ruth Terán fue una espléndida Gilda, con soltura teatral, una voz exquisita y una impecable línea de canto. Sandra Ferrández, David Cervera y Pedro Quiralte estuvieron solventes y eficaces.
Es de esperar que la idea siga pudiéndose repetir y que más productores tomen nota del éxito de esta convocatoria que ayuda a acercar a un público más amplio a este noble género, sin merma de su calidad. * José Miguel BALZOLA, corresponsal en Bilbao de ÓPERA ACTUAL
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