Nicola Porpora: L’ANGELICA (Dir.: Federico M. Sardelli)

Recitativos y arias de suprema calidad ilustran el texto de Metastasio, inspirado –¡uno más!– en el Orlando furioso de Ludovico Ariosto, y Federico Maria Sardelli dirige todo este material con pulso seguro y profundo conocimiento del estilo. Gianluca Falaschi diseña un espacio escénico esencial con una mesa rica en flores y frutas –a la que incorpora un corazón sangrante para las últimas escenas– y una proliferación de drag queens y criados empenachados para no dejar solos a los solistas, en una muestra más del horror vacui tan aborrecido por los registas actuales. No llegan a molestar.

El censo de solistas vocales es de una inusitada calidad. El Orlando de Teresa Iervolino, ratificando la buena impresión que causaría después su Adalgisa liceísta, tiene la necesaria autoridad, mientras la Angelica de Ekaterina Bakanova, aunque ocasionalmente hiriente, luce un esmalte precioso y un fraseo impecable. Barbara Massaro es un Tirsi infantil en el timbre, pero muy bien cantado, y Gaia Petrone es su siempre bien enfocada Licori. A Paula Valentina Molinari le corresponde la que quizá es el aria más bella de la ópera, una “Bella diva all’ombre amica” que dibuja a la perfección. Giorgio Foresti cierra el reparto con un bien impostado Titiro. En el formato CD se incluyen no solo los textos ya presentes en el video, sino todo el texto cantado. Se agradece, y mucho.  * Marcelo CERVELLÓ