CRÍTICAS
NACIONAL
La difícil facilidad de René Jacobs
Barcelona
Gran Teatre del Liceu
Gluck: ORFEO ED EURIDICE
En versión de concierto
Helena Rasker, Polina Pasztircsák, Giulia Semenzato. Freiburger Barockorchester. RIAS Kammerchor. Dirección: René Jacobs. 8 de junio de 2023.
Parece fácil manejar los fastos barrocos del repertorio clásico, pero dista mucho de serlo. René Jacobs, con su abrumador bagaje en la materia y su dominio del gesto y de la conducción musical, hace, sin embargo, que lo parezca. En esta ocasión en el Liceu, al mando de una Orquesta de Friburgo nítida en el sonido e impecable en la afinación y de un RIAS Kammerchor que conjugaba las voces bien impostadas con un fraseo de manual, proponía la versión original vienesa de Orfeo ed Euridice sin los implantes de la posterior ampliación francesa de 1774 —más de un espectador echaría de menos la ariette de Orfeo que cerraría allí el primer acto o el aria de Euridice en el segundo— con el vigor y la contención que esta edición requiere y que obtuvo de manera soberana de manos del aclamado concertador belga.
En el apartado relativo a los solistas vocales, donde a menudo se imputa a Jacobs una cierta indiferencia en sus criterios electivos, todo funcionó esta vez con un equilibrio admirable. En el papel protagonista, Helena Rasker, aun con algún pasaje poco definido en la primera octava, hizo alarde de una emisión generosa y de musicalidad impecable, recurriendo con grato efecto a un juego de apoyaturas en “Che farò senza Euridice” que no llegarían a desdibujar la serena desesperación de la página. Polina Pasztircsák se amparó en la belleza de su timbre para mostrarse a su altura y Giulia Semenzato, que sustituía a la previamente anunciada Kateryna Kasper, animó el muy escaso movimiento escénico con su dinámica presencia y una voz que sino excesiva en volumen sí acreditaba un grato esmalte.
El público liceísta, muy comedido en el curso de la ejecución, mostró al final su satisfacción con sus interminables ovaciones (las mismas que recibiría la obra más tarde, con los mismos intérpretes, tanto en su paso por el Teatro Real de Madrid como por el Auditorio Príncipe Felipe de Oviedo). Una segunda etapa en el ciclo órfico liceísta de resultados plenamente positivos. Monteverdi lo cerrará en la ya anunciada próxima temporada. * Marcelo CERVELLÓ, crítico de ÓPERA ACTUAL
CRÍTICAS RELACIONADAS