'Falstaff', o la comedia hedonista de Bieito

Hamburgo

28 / 01 / 2020 - Xavier CESTER - Tiempo de lectura: 3 min

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Ambrogio Maestri fue un Falstaff de referencia © Staatsoper Hamburgo / Monika RITTERSHAUS
Una imagen de la estructura que preside la producción de Calixto Bieito © Staatsoper Hamburgo / Monika RITTERSHAUS
Maestri al lado de Markus Brück, quien fue un Ford vibrante © Staatsoper Hamburgo / Monika RITTERSHAUS
Oleksiy Palchykov, Maija Kovalevksa, Elbenita Kajtazi y Nadezhda Karyazina interpretaron los roles femeninos a muy buen nivel © Staatsoper Hamburgo / Monika RITTERSHAUS

Staatsoper Hamburgo

Verdi: FALSTAFF

Nueva producción

Ambrogio Maestri, Markus Brück, Oleksiy Palchykov, Maija Kovalevska, Elbenita Kajtazi, Nadezhda Karyazina. Dirección: Axel Kober. Dirección de escena: Calixto Bieito. Staatsoper de Hamburgo, 25 de enero de 2020.

Tercera producción de Calixto Bieito para el escenario principal de la Staatsoper de Hamburgo, y tercer Verdi. Tras Otello y el Requiem, el director español, Premio ÓPERA ACTUAL 2019, abordó ahora Falstaff, punto de arranque de un intenso 2020 que supone una inusual incursión en un campo, la comedia, que ha cultivado poco, y que además traerá el que seguramente será el mayor reto de su carrera, la Tetralogía wagneriana en París.

¿Contribuyen estos factores a la difusa sensación de montaje con piloto automático, con ideas dispersas y recursos ya vistos? La dicotomía entre un Falstaff hedonista sin medida (la primera imagen es la del pancione devorando ostras con champán) y un entorno pequeño burgués e hipócrita queda diluida por un humor de trazo grueso y limitada eficacia y un dibujo de los personajes sin la precisión punzante de los mejores trabajos de Bieito. La escenografía de Susanne Gschwender recrea de forma efectiva un pub británico, The Boar’s Head, espacio de socialización de una masculinidad, como mínimo, desorientada que irá desmontándose a medida que Falstaff se enreda en las intrigas de unas alegres comadres con más sentido común y camaradería que los representantes del otro sexo. Incluso la dulce Nannetta lleva la iniciativa sexual ante el apocado Fenton, con descubrimiento inesperado, predictor mediante. Queda una duda, la aparición en el tercer acto de Falstaff sentado en una taza de wáter, ¿es una autocita y/o homenaje a los celebérrimos urinarios de Un ballo in maschera?

"Ambrogio Maestri sigue siendo un Falstaff de referencia por la firmeza de la voz, la riqueza de matices y, en esta ocasión, la capacidad de reírse de sus propias características corporales"

Dominador absoluto de un papel que ha interpretado docenas de veces, Ambrogio Maestri sigue siendo un Falstaff de referencia por la firmeza de la voz, la riqueza de matices y, en esta ocasión, la capacidad de reírse de sus propias características corporales. Aunque la latinidad no fue su principal característica, Hamburgo reunió para esta comedia un sólido equipo formado tanto por solistas invitados como por miembros de la compañía. Markus Brück (Ford) protagonizó un vibrante descenso en la paranoia en su gran escena del acto segundo, Oleksiy Palchykov fue un Fenton de lírica tersura, Maija Kovalevksa una Alice de medios generosos con una ligera tendencia a la estridencia en el extremo agudo, Elbenita Kajtazi una Nannetta de notable delicadeza, y Nadezhda Karyazina una Mrs. Quickly de timbre oscuro y algo engolado. Pese a puntuales desajustes entre foso y escena, Axel Kober dirigió una versión correcta, sin sorpresas ni revelaciones, atenta a la chisporroteante escritura de este Verdi final.