CRÍTICAS
INTERNACIONAL
Éxito alemán con el ‘Don Pasquale’ de Maestri
Hamburgo
Staatsoper Hamburg
Donizetti: DON PASQUALE
Nueva producción
Ambrogio Maestri, Danielle De Niese, Levy Sekgapane, Kartal Karagedik. Dirección musical: Matteo Beltrami. Dirección de escena: David Bosch. 4 de junio de 2022.
Esta nueva producción de Don Pasquale se estrenó con éxito clamoroso en la Ópera de Hamburgo, con standing ovation para toda la compañía en los saludos finales, montaje que se retransmitió en directo por Arte.tv y que en estos días puede verse en la página de inicio de ÓPERA ACTUAL. Por supuesto que en Alemania solo podía tratarse del Regie-Theater, pero la obra cómica maestra de Donizetti tiene las espaldas anchas y lo soporta todo en materia de veleidades escénicas como esta de David Bosch con las variantes dramatúrgicas de Detlf Giese, en la que Don Pasquale se convierte en un avaro Paperon de Paperoni –Ambrogio Maestri se las arregla muy bien ahí– al que seduce una descocada Daisy Paperina que, una vez domado el pobre multimillonario, se instala, con bañera y guardarropa incluidos, junto a la cada vez más depauperada caja fuerte, en una escena giratoria como único elemento escénico.
Completan la escena una serie de proyecciones de vídeo –que reflejarán una realidad local que se le escapará al forastero– retratando a un Don Pasquale siempre metido en la política, que firma Peter Tschentscher y realizados por Patrick Banwart, también autor de la escenografía, siendo el vestuario de Falko Herold y el juego de luces de Bernd Gallash. Un espectáculo que funciona sin problemas aunque con detalles de una cierta grosería como un Pasquale en paños menores y una Sofronia que se presenta con habito de monja por encima de su traje de boda. Son cosas que el público agradece y no hay más que decir. En realidad, todo resulta muy divertido pese a las evidentes incongruencias con el texto del libreto.
La vertiente musical resultó mucho más placentera, gracias sobre todo a la labor del maestro Matteo Beltrami, que autorizó una versión absolutamente íntegra de la obra con la único excepción de un pequeño corte en uno de los recitativos, cosa menos infrecuente ahora al haberse recuperado la cabaletta del tenor y la versión completa del rondó final de Norina que eran eliminados sin piedad en las representaciones de los años setenta. Beltrami consigue la ímproba empresa de reducir una orquesta, la muy notable Staatsorchester Hamburg, habituada a tocar la música de Warner o Strauss, a las domésticas dimensiones donizettianas, procurando al mismo tiempo no cubrir a las voces, mostrando un gran sentido del ritmo en todo momento. Muy buena la prestación del coro preparado por Christian Gunter, que facilitaría también las voces de los criados solistas en la escena que abre el tercer acto.
Superlativa la prestación de los solistas vocales, desde un puntualísimo y bien caracterizado Notario en la persona de Nicholas Mogg al Malatesta del optimo barítono turco Kartal Karagedik, tan gallardo vocal como interpretativamente, perfecto en los sillabati en el dúo con Don Pasquale, que tuvo que repetirse a instancias del público. Ernesto encontraría en el tenor sudafricano Levy Sekgapane una presencia idónea y una absoluta propiedad estilística, con un deslumbrante Re bemol como corona de su cabaletta y una exquisita línea vocal que recuerda la de Juan Diego Flórez. De Ambrogio Maestro como Pasquale poco hay que añadir dado el gusto, la intención y la sutileza de que reviste a cada una de sus palabras tanto en el recitativo como en el canto spianato; su voz amplia y potente, que maneja con la máxima naturalidad, completa el cuadro de un protagonista que hoy por hoy conoce pocos rivales.
Como guinda en el pastel brillaba la garibaldina Sofronia de la soprano australiana de origen cingalés Danielle De Niese, considerada hoy en el ámbito internacional como una especialista solicitadísima especialmente en el repertorio barroco. Quizá por ello sorprenda una línea de canto tan libre y cercana al grito y su particular concepto de la coloratura. Lo compensa, sin embargo, con una espectacular actuación escénica, muy ajustada al concepto del regista. Gustó mucho al público, que reservó para ella una entusiástica acogida. El espectador suele tener siempre razón, y de ello se toma aquí la debida nota. * Andrea MERLI, corresponsal internacional de ÓPERA ACTUAL
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