CRÍTICAS
NACIONAL
'Don Giovanni', del almidón al gesto
Sabadell
Fundació Òpera Catalunya
Mozart: DON GIOVANNI
Nueva producción
Carles Pachón, Fernando Álvarez, Tina Gorina, Maite Alberola, César Cortés, Mar Esteve, Xavier Casademont, Jeroboám Tejera. Orquestra Simfònica del Vallès. Coro de los Amics de l’Òpera de Sabadell. Dirección musical: Daniel Gil de Tejada. Dirección de escena: Pau Monterde. 21 de octubre de 2022.
Cuando se sale de un teatro después de un Don Giovanni acogido jubilosamente por el público se tiende a pensar en la concepción real del proyecto, que siempre suele presentar matices. Daniel Gil de Tejada optó por un Mozart musicalmente impecable pero excesivamente sujeto a la operación de planchado a que ha sido sometido, convertido casi el drama buffo en una ópera de cámara y los contrastes dinámicos mermados por un sotto voce generalizado en la gestión de los recitativos, siempre al límite de lo escasamente audible, o un acompañamiento a la serenata del burlador que, sencillamente, no llegó a la sala del Teatre de La Faràndula. Todo ello, claro está, sin perjuicio de una buena concertación al frente de la Simfònica del Vallès, impecable, y de un coro que lo fue algo menos.
La escena, en cambio, se beneficiaría de un tratamiento poco frecuente en los montajes actuales, donde suele sustituirse la naturalidad por el gesto desabrido o provocador, con diálogos y apartes bien articulados que demostraban que Pau Monterde ha trabajado esta vez a fondo en el tratamiento de los personajes. Todo sonaba a nuevo, a pesar de la presencia de ese lienzo rojo que engulle a Don Giovanni en el final o de esas estatuas semovientes de acreditados servicios en la casa que, sin embargo, enmarcarían bien la escena del cementerio. Las luces de Nani Valls dieron, por cierto, interés a una fiesta en el finale primo que los recursos disponibles no permitían hacer más ostentosa.
En el cuadro de solistas vocales descollaba el protagonismo de Carles Pachón por poderío vocal –la suya era la mejor proyectada de las voces– y por creatividad interpretativa, todo un augurio para una carrera que no por incipiente parece menos asentada. Aun con una voz de no especial contundencia, el barítono argentino Fernando Álvarez fue un Leporello de múltiples recursos y de buena actitud teatral, con una versión del aria del catálogo excelentemente expuesta. En este grupo de cabeza podría incluirse a Tina Gorina, una Doña Ana de buena línea y facilidad en la coloratura pese a un devenir escénico un tanto remiso, que mereció una particular ovación después de una bien cantado “Non mi dir” y a César Cortes, de voz un tanto ahilada, pero de óptima gestión del fiato. Menos afortunada en esta ocasión fue la Elvira de la polifacética Maite Alberola, a ratos un tanto descontrolada en la emisión y con una dicción mejorable, y correctas las aportaciones de Mar Esteve, voz pequeña pero bien modulada –lo de definirse como mezzosoprano puede ser solo una opinión– y Xavier Casademont, un muy activo Masetto. Jeroboám Tejera no llegó a inspirar terror en sus intervenciones del segundo acto; respeto, y sensación de autoridad, sí. * Marcelo CERVELLÓ, crítico de ÓPERA ACTUAL
CRÍTICAS RELACIONADAS